No me salen las palabras, es todo caótico.. nada claro, todo en niebla de suspiros, en palpitares que avanzan y se aceleran, en miradas que se pierden en la misma calle en la que te vi venir por segunda vez, en la que te vi acercarte a mi y escucharte hablar, hablar y hablar, empezaste a enseñarme, a explicarme, a contarme.. y yo mientras tanto perdida entre zapatillas, tu mirada, ropa, tus labios... .
"Camyla", que tono aquel que utilizaste para dirigirte a mi esa tarde casi noche.. creo que en ese instante comprendí aquello que la gente dice de que poco, puede significar mucho... Cuantos sentimientos floreciendo sin miedo, en esas letras, cuantas ganas de todo... y que llama se encendió en mi.. que latir más dulce.
Y son tantos y tan grandes los recuerdos que tengo de tan poco tiempo, que si sigo haciendo memoria, voy a perderme una y otra vez en el laberinto en el que la única salida solo eres tu.
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