La verdad es que ver bien, a los que hoy en día consideras tu gente transmite paz. Al menos a mi me pasa... Ver esas sonrisas tontas, alegres y agiles en las caras de las personas a las que más quiero es una pasada. Es una pasada porque mientras los tuyos y tu al rededor esté bien, sabes y te das cuenta de que existe la felicidad. Tanto si es gente con la que hablas a menudo, o si son personas que hace mucho con las que tan si quiera intercambias una palabra.
Pocas cosas tan dichosas hay como que tu alrededor sea feliz.
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