sábado, 10 de octubre de 2015

La vida

La vida me está dando la oportunidad de cerrar puertas, y volver a empezar. Sería estúpida de no aprovechar esta oportunidad. Es necesario ir a un único tiro, a una única parte. Nunca se explotará uno al máximo si se divide.

Aprendí a amar rápido, lento, con paciencia y sin ella, con celos, sin, con besos, sin abrazos, sin palabras, con miradas... Amé tantas veces que estoy cansada.

Conocí amores que parecían tan reales , pero tenían tanta manipulación y tanto juego detrás, que una vez abres los ojos sientes como se te desgarra el alma... Ay. Conocí otros tiernos, y preciosos, que de tan bonitos que eran no quise ni creerlos. No puedo decir haberlos conocido todos, por suerte. Pero sólo necesito uno. Y uno último.

Entendí, después de tanto, que todas esas veces que amé, no pude amar peor.
Limpio mi alma, y me deshago de cosas vanales e inecesarias, aprenderé a amar de verdad, sinceramente. El amor necesita tiempo, dedicación, cuidado y cariño.

Comprendí que el corazón es como un trozo de celo, que la primera vez que lo pegas, pega muy bien, pero al despegar y al volver a pegar, ya no pega tanto, y así sucesivamente.

Creo que Dios creó nuestro corazón , para amar a todas las personas, pero solo lo preparó para amar a nuestra mitad, una sola vez. Y en realidad, lo hemos desgastado tantas....
Iba conduciendo y en un momento comprendí algo que me hizo darle un giro a todo... Cómo el amor iba a doler? Que ciegos y estúpidos! , yo la primera.

Cuando tu persona llegue, lo sabrás, y solo debes esperar una respuesta del cielo.

Amen.

No hay comentarios:

Publicar un comentario