miércoles, 24 de diciembre de 2014

"You're the one that I want"

Contaba un cuento que unas manos hablaban. Y que hablaban sólo un lenguaje.. El lenguaje del tacto.. En braile. Pero que solo hablaban con un cuerpo, un cuerpo que podía entenderlas, no que especialmente ni lo intentara,  sólo que podía,  si quería,  entender lo que ellas decían.
Estas primero recorrían otras manos... Y una espalda. Una espalda a la que se agarraban con fuerza.  Después fue un cuello, un cuello largo, y la nuca.. Una nuca con pelo del que tirar, pero no enredarse.
Luego fue la mandíbula, la oreja... La espalda y arañar.. Después necesitaron correr euforicas por todos los rincones... La droga llegaba a sus yemas..  No podían parar.

Hasta que finalizó todo.

No pudieron doparse más...  y comenzaron a escribir, a escribir para remplazar,  para subsanar.. Para que aprendieran a entenderlas... Y quizás,  algún día,  hasta a quererlas como ellas querrían haber amado.

domingo, 21 de diciembre de 2014

" si no te gustan mis defectos.. Tengo más"

Uno para mí ; el quererte sin medida, y 173848 todos para ti.

De esa manera

Los silencios son tan ausentes, que tocan las fibras más sensibles del alma. Y de esa manera tan simple, descubrí la verdad del corazón.. Que quiere querer,  y que con eso, le basta.

sábado, 20 de diciembre de 2014

Y van tan rápido...

Los coches van tan rápido que te hacen descrubrir el mundo de las líneas horizontales.  Las líneas que sólo son, cuando están enfrente, cuando están delante y detrás,  se ven como figuras desde diferentes ángulos. Pero bueno.. A los coches siempre les sigue la luna.

Esa forma de andar

Y si se le reconoce por algo es por como se mueve, por cómo camina, por como come las bocas, por cómo siente la vida, y sobre todo, por cómo folla.

Lo que sobra

Lo que sobra son todas esas bocas, todas esas palabras, incluso todas esas zapatillas. Sobran tus ojos, y sobre todo tu corazón,  ese sobra el que más.

domingo, 14 de diciembre de 2014

Un tesoro que me deja quererle..

Hoy partí en busca de un árbol. Pero no cualquier árbol, si no, que en busca de EL ÁRBOL. ¿Por qué razón tan importante? Pues si te digo la verdad,no había nada de importante en ir a buscar un árbol. 

Pero bueno, este en especial me tenía curiosidad. Lo llevo viendo desde la ventana de mi habitación desde que llegué A Coruña, que de eso, ya hace años. Lo llevaba viendo a los lejos durante tanto tiempo.. Llamó mi atención porque se levanta sólido y robusto frente al mundo, al rededor no tiene nada, es decir, está solo.. Sólo porque no hay más árboles a su alrededor. Desde mi habitación se ve tremendo. Pero sobre todo curioso... Y como me gusta la curiosidad, hoy, 14 de diciembre de 2014, quise ir a buscarlo, con tanta suerte, de que lo encontré. 

Aunque, bueno, debería decir que ya fui una vez en su búsqueda y no obtuve ningún buen resultado. En realidad desde mi ventana se ve un camino recto, pero cuando estas abajo, pisando la acera, ves tantos caminos que parecen rectos.. que yo la primera vez escogí el que no era. Y en realidad, no hay ninguno recto, por cierto.


A medida que me iba acercando a él, empecé a tener dudas.... Mientras más me acercaba, más pequeño se iba haciendo.. Dudé muchas veces de si me había vuelto a equivocar de árbol,.. Pero no. 

Llegué a él a través de un camino de barro inclinado hacia arriba,,, Es un pino, Un pino normal, no más alto que ningún otro.. sólo que está solitario, y además, en el punto más alto.. por eso se ve tan grande, su soledad le hace grande. 

Cuando lo toqué, no sentí nada, en realidad estaba algo decepcionada.. "¿ Eres tú? ¿Tú eres ese árbol que se ve tan grande a lo lejos?" Enseguida ese sentimiento tan absurdo se modificó por alegría... " Menos mal que te encontré" 

Así que, esto es para ti:

Hola querido Pino. No voy a modificarte el nombre, puesto que no puedes hablar ni puedes decirme en realidad como te gustaría llamarte, así que te dejaré con el mismo nombre con el que te denominan, y lo haremos propio poniéndole la primera letra mayúscula.. espero que estés de acuerdo. Hoy te vi por primera vez desde cerca.. Es curioso, porque desde lejos te ves enorme, y esbelto, pero lo que más curiosidad me causa , sabes qué es? Que sea la soledad quién te hace tan grande. Supongo que tal vez no te gustaría estar ahí, lejos de los demás árboles.. pero a la vez supongo que te encanta... vaya vistas hay desde esas alturas. Sé que no soy nadie para escribirte.. pero eres tan bonito.. y a la vez, te digo que eres "normal", como los demás arboles, como si no fueras enorme en comparación conmigo... He llegado a ti.. lo intenté otros varios días en verdad, pero siempre ocurría algo que me impedía llegar a ti, o emprender el camino.. Aunque hablar del pasado no tiene sentido, así que, aquí estoy Pino. ¿Sabes que tienes pinta de ser escalable? ( no sé ni si esa palabra existe, pero la vamos a poner igual) A partir de ahora las visitas serán mucho más reiteradas.. Parece que sea yo quién te vaya a hacer compañía a ti, pero la realidad es, que nos la vamos a hacer mutuamente.. Al fin y al cabo, eres mejor que cualquier persona sobre la faz de la tierra.. en el sentido de bueno digo. ¡ Tienes menos malicia que cualquiera de nosotros! Estoy segura de que viste a Furia Negra volando por aquí.. ese pequeño dragón me va a volver loca algún día. Ah! no te lo he contado.. Ahora perteneces a mi mundo.. sé que el haberte hallado no te hace mío, aunque quisiera, que tampoco lo deseo, pero no porque no te quiera, si no porque cuando a veces queremos algo, debemos dejarlo totalmente libre para que pueda elegir y ser feliz a su manera. El caso; que perteneces a mi reino ahora! El reino de los Limones! Ya lo irás conociendo.. ya te iré contando sobre el.. No es feo! Tiene cosas muy chulas. 

Eres muy bonito, y estoy muy contenta.. me has hecho feliz. Me he dado cuenta de que a veces sólo le damos importancia a las cosas que nos parecen curiosas o asombrosas, pero mírate, me has enseñado que eres un árbol totalmente normal, pero curiosamente especial.. Parecías algo que no eres, y no por ello te quiero menos.. Ya lo sabré explicar algún día. 

Bueno, en pocas palabras, que.. gracias.. por estar ahí, por no moverte de ahí.. Por dejar que te vea todos los días, por enseñarme a estar en pie... gracias por estar justamente ahí.. porque de haber estado un metro más a la derecha.. no te vería. Gracias, simplemente, por dejarte sentir mío, y no serlo. 

Gracias por entrar en mi mundo, y por todas las sonrisas que me has sacado, pero sobre todo, por tu paz.. 

Ya te escalaré! Te quiero ...

AH! Cuando me aprenda el nombre del viento.. te llamaré así, solo por ver como se fastidian tus hojas, y echarnos a reír..



miércoles, 10 de diciembre de 2014

Una vez

Y de pronto se escuchó un estruendoroso "no",  y desde ese momento,  conocí tu nuca, tu espalda, esas cosas que conoces cuando.. Ya sabes.. Cuando alguien se va.

viernes, 5 de diciembre de 2014

Con algo de suerte

Igual, si tiras una moneda, no sale ni cara ni cruz, sale lo que querías,  y que con algo de suerte, ya no.

Cántame

Cántame como quieren los que no están enamorados, igual, hasta me quieres tanto.

jueves, 4 de diciembre de 2014

Es curioso

Es curioso como a veces no hace falta ni pensar como vas a entrar en una tormenta. Tu cuerpo, por sí solo, se adapta a la situación dejando que los nervios actúen sobre el muñeco que controlan.

Es simple, porque pensar no arreglará nada, ni si quiera, intentar actuar como un muro te cubre de la tormenta..

Y así es como se disponen a sufrir las almas.. Bajo la sombra del mar alto, pero al menos no cabizbajos.

Las máquinas mienten.

Estaba en Historia del Arte leyendo, cuando me entraron ganas de hacer pis. Mucho pis. (como siempre)

Le anuncié a mi compañero de al lado, pelirrojo por cierto (un roba almas donde los haya), de que me meaba. Miré mi reloj,  que lo tenía puesto en la muñeca izquiera que marcaba la una y cuarto, lo que quería decir que faltaban veinte minutos para que acabara la clase y que mo vejiga no iba a resistir, así que justo cuando iba a empezar a hacerle señas a la profe para anunciarle que me iba a ir al baño porque no aguantaba mi compañero me dijo:

- Pero espera mujer, que faltan cinco minutos para que acabe

A lo que yo respondí confusa:

- Pero cómo van a faltar cinco si ésta clase acaba a y treinta y cinco, y son y cuarto?

Me enseñó la hora que marcaba su móvil,  las 13,30. " Imposible" pensé.
- En mi reloj pone y cuarto- y cogí mi móvil para asegurarme, y para sorpresa mía,  marcaba la misma hora que la del móvil de él. - Pero cómo es posible? - No le di más vueltas y me quité el reloj para corregir la hora, pero bueno, como me muerdo las uñas usé los dientes para desplazar la bolita que controla las agujas hacia fuera sin éxito.
Mi compañero me ayudó,  y modifiqué la hora. Seguido acabó la clase y fui corriendo al baño. No había papel, muy común. Sin embargo, en el último baño quedaban dos cachos de papel, y mientras meaba, pensé en que no entendía lo del reloj, " se habrá estropeado, o el mundo está raro y me ha robado tiempo".

Me dió por pensar que alguien podría haber cambiado la hora sin que me diera cuenta, pero.. Cómo?  No era posible, nadie que no fuera yo lo había tocado.

Sigo examinando el reloj, y funciona bien. No lo entiendo. ¿Qué es más cierto,  una máquina digital o un reloj de muñeca? O puede que.. Quizás se haya retrasado solo para inspirarme a escribir esta ida de olla. O que el tiempo estuviera enfafado porque ayer no quise que el mundo existiera. O incluso, puede que sea una venganza por parte del
reloj, por no mirarlo casi nunca o por la historia que escribí hace un tiempo sobre ahogar relojes. También puede que el mundo esté en mi contra, pero no, descarto esa idea rápido porque quedaba papel en el último baño.

Puede que en realidad me esté ayudando a que mi mente no entre antes de tiempo en la tormenta que se me avencina hoy.

En fin.

miércoles, 3 de diciembre de 2014

A

Era una persona impasiva, implacable; cuando más cerca piensas estar de ella, más rápido te aleja y sientes que no la conoces. Es abierta,  le encanta la gente, hasta confiar en ellas es una idea que le atrae, pero nunca de deja ver. Puedes creer que hasta sabes cuando está bien, o cuando está mal, pero no importa porque no te da ni tiempo a preocuparte ni a actuar, ella sola ya se reconstruye rápido.

A veces, la vi llorar, la vi desmoralizarse o eso creí,  pero no lloraba ella, si no que sus ojos, su cuerpo... No eran lágrimas de cocodrilo, pero tampoco eran reales. Es como si tuviera un vaso lleno de agua y ella sólo lo vaciara un tercio.

Comprendí que... Que no hay verdad en las personas. Que no hay verdad ni en los ojos, ni en las palabras, ni tan si quiera en todo lo que ves, ni en las esencias,  ni en el sentimiento,  sólo porque nunca lo veras incorporeo, como es real.

Pero, sí la hay en los gestos. Pero no en los automáticos, si no que en los que una persona no puede controlar, en los vivos.
Hay verdad en los momentos de desconecto, cuando las personas miran a un punto fijo, cuándo están de pronto, en su mundo. Ahí hay pureza, ahí hay realidad.
Hay verdad en los momentos que cree que nadie le observa. Eso es cierto, ahí está lo que no va a contar y en lo que seguramente ni sepas que oculta. Ahí está la esencia..

Ahí una persona, pasa a ser, un ser humano.

Porque los instintos ciegos, siempre te delataran.

martes, 2 de diciembre de 2014

Una persona olvidable.

Con muchos peros siempre en la lengua, pero con pocas palabras. No le gustaba hablar tampoco. De las pocas palabras que decía ninguna tenía sentido. Eso sí, nadie nunca supo todo lo que le gustaba escuchar. Se pasaba tardes enteras escuchando a las personas de su alrededor hablar. Es normal que no quisiera después abrir la boca.. con tanta información empezar se le haría fácil y ameno, pero.. y parar? A veces nunca se sabe cuando parar si todo te parece importante. 

Resulta que este viejo hombre, con un pelo cansado de maquillarse, tenía un poder. Tenía el poder de conseguir oír a kilómetros la voz de las personas.

Se crió acostumbrado al silencio, por lo que pronto su oído comenzó a agudizarse de tal forma que cualquier sonido de la ciudad le habría vuelto majara. 

En realidad me da pena pensar en él, y sobre todo recordarlo.. Cuando lo conocí estaba sentado en un banco, y me dio por ocupar el espacio de al lado. Le dije hola, y no me contestó, miraba fijamente al frente. Intenté dirigir mi mirada a lo que ese hombre miraba, pero no encontré nada más que monte. Así que, intenté sacar tema de conversación de todas las raíces que me fuera posible.. y nada , ese hombre seguía sin dirigirme la palabra. Me enfadaba yo sola, empezaba a decirle que era raro y que era imposible mantener una conversación con él.. por lo que, con todo el descaro del mundo, me puse a pensar en voz alta, sólo para molestarle. Hablé de cualquier cosa, imaginé un mundo delante de nosotros. Hasta que en un momento me miró, ( ni supe calificar esa mirada) y me dijo: "shh". 

Me levanté indignadísima y me fui. 

Al día siguiente, me levanté en el mismo pueblo, en la misma cama que el día anterior, y volví a ese banco. Ahí seguía ese hombre.  " Es que a caso no tiene casa?" pensé. 
De nuevo, me senté a su lado, y le pregunté si es que a caso no tenía casa. Y no me contestó. Como era de esperar. Y comencé a hablar yo sola, otra vez. 

Aquel hombre tuvo tan mala suerte.. porque acababan de darme una semana de vacaciones y como solía hacer, cogí el coche y me planté en un pueblo remoto sólo por descubrir.. Aunque en verdad, no era cierto. Fui por casualidad a aquel pueblo sólo para olvidar.. Me habían hecho mucho daño, y estaba totalmente destrozada, acababan de partirme en dos, o en dos mil minicachitos... Aníbal Torco Nieve, así se llamaba mi dolor. Mi pesadumbre. Mi aire.. Y eso. Así que, tuvo mala suerte, porque le conté todo lo que podía. A veces las cabezas locas solo necesitan a alguien que les cuente cosas. 

Cuando acabé de llorar y reír, volví a estar enfadada. Maldito señor. No me hablaba! 

Durante el restos de días mi cabeza daba vueltas de un lado a otro , " ¿Por qué no me hablaba aquel hombre?" Pensé en cincuenta posibilidades de por qué no me contestaba, pensé que me ignoraba, luego en que en realidad era sordo! o no, mejor! Que me le gustaba mi voz y por eso no quería que me callase.. y en fin , muchas barbaridades a las que acude un alma desesperada cuando no alcanza la compresión sobre un tema. 

Cuando llegó el día de mi vuelta a la monotonía, me acerqué al banco en el que me pasaba los días haciendo el tonto , intentando ver algo en esa persona que tan si quiera sabía si me prestaba atención.. y le dije que me iba, y que probablemente no volvería. Me miró, y con una sonrisa levantó la mano diciéndome adiós. 

- Oh no! Llevo días aquí sentada a tu lado, ni me dijiste hola, pero si me dices adiós!? ADIÓS? Eso sí? Pues muy bien.  

- Yo no te he dicho nada. 

- OH! Y AHORA HABLAS? NO ES JUSTO QUE PRECISAMENTE CUANDO ME VOY HABLES! POR QUÉ! - Mis nervios estaban por las nubes, y no, no quería tan si quiera controlarlos, de hecho, cuando lo pienso, me río de mi misa por lo ridícula que soy a veces.

Y después de mi berrinche, me fui. 

Pasaron meses y meses, y no dejé de pensar en ese hombre tan extraño. Creo que incluso me obsesioné. Así que , una tarde, no me aguanté más, y volví al pueblo, y volví al banco. 

- Así que, sigues aquí eh? Ya no estoy enfadada. 

Nada, no había respuesta. 

- Ya te entiendo. Por cierto, me he inventado que tienes el poder de escuchar a kilómetros, y que por eso no hablas. Porque tienes demasiado que escuchar tal vez.. o que no sabrías parar si empezaras. Pero lo mejor! Ya sé por qué me mandaste callar el primer día!! Estabas escuchando a una de todas aquella mujeres de las que te enamoras cada cierto tiempo.. fijo! Y por eso no me hacías caso... no? puedes ser, no? - Dije con una sonrisa de oreja a oreja. 

Pero de nuevo nada, más que una mirada que seguía siendo indescifrable. 

- En realidad he venido a darte las gracias, me centré durante tanto tiempo en tu silencio, que le quité la importancia que le estaba a dando a cosas que no tienen sentido. Me has curado las heridas con silencio.. y bueno, simplemente eso, que gracias. 

Pasó el tiempo, y crecí en mi carrera de una forma asombrosa.. pero de todo eso no tiene sentido hablar. Volví muchos años más tarde a aquel pueblo,y ese hombre tan curioso ya no estaba..  Mandé construir una estatua de un hombre sentado , y la puse en aquel banco.. 

Porque tu lo sabías, verdad? Sabías que no podías ser olvidable. 




lunes, 1 de diciembre de 2014

Raro

Qué inútil verdad? Perseguir un globo de helio. Qué cosa tan insulsa ver como se aleja y perseguirlo hasta que ya no se divise.
Sería tan estúpido cree que puedes alcanzarlo? Tener la esperanza de poder llegar a él? Y luego, te consolarias pensando en que al menos es libre y puede escapar?
Entonces, creo, que el siguiente pensamiento será que tú no puedes escapar y te enfadarías, tendrías envidia de no ser un globo que puede irse cuando quiere. Luego iría el sentimiento de pena? " pobre globo que ni si quiera sabe, porque no puede pensar, que está escapando"... Y después,  te sentirías triste por ti? Porque.. Entre vuelta y vuelta dejaste de prestarle atención a su ida. Entonces, dirías " que tonta soy" o " bah, que tontería pensar en eso"?

Y continuaría el tiempo corriendo, seguiría tu vida, y no volverías a recordar ese momento.

Qué volátil son los sueños y las ilusiones a las que no les encuentras sentido.